Siempre han existido películas con leyendas alrededor, generalmente por extraños sucesos que las acompañan, pero aquellas que se han ganado el despreciable título de películas malditas, lo han hecho porque los sucesos no acaban con la grabación del filme, sino que parece quedarse impregnada en los realizadores, quienes acaban desdichados o, en el peor de los casos, muertos.
Poltergeist
Las aterradoras y visionarias películas de Poltergeist son famosas tanto por su calidad como por el maleficio que se le atribuye. Dichos rumores comenzaron con Dominique Dunne, la actriz que interpretaba a la hermana mayor de la protagonista y que cuando tenía apenas 22 años fue estrangulada por su novio. Julian Beck murió de cáncer en el estómago antes siquiera de poder aparecer en la película, así como Will Sampson que aparecía como médico y murió a los 53 de una complicación en una operación.
Sin embargo, el caso más famoso fue el de Heather O’Rourke, la protagonista de la película y que murió a los escasos 12 años de un shock séptico. Incluso su madre aseguró haberla visto en el hospital donde falleció diciéndole “Mamá, no voy a volver” desde una ventana.
El bebé de Rosemary
Se cree que en el caso de esta película, la maldición no provino de sus involucrados sino del lugar en que fue filmada: el edificio Dakota, Nueva York. Según se decía, las personas que ingresaran al edificio morirían de forma trágica. Y a pesar de lo irreal que suene, para el caso del equipo de filmación no fue cuestión de risa, ya que un año después del estreno, el compositor de la música falleció por un coágulo cerebral, y lo mismo le ocurrió a otro de los personajes.
Pero seguramente el más famoso y controvertido fue el del asesinato de la actriz Sharon Tate, esposa del director y extra en la película, que murió a manos de la familia Manson.
La Profecía
Antes de la filmación de la película, el avión donde viajaba el actor principal Gregory Peck fue alcanzado por un rayo. Ocho horas después el avión donde viajaba el guionista también fue víctima de un rayo, y aunque en ninguno de los dos hubo muertos, Peck estuvo a punto de subirse a un segundo avión, pero a último momento lo canceló, y ese avión acabó estrellado y sin sobrevivientes.
Por descuido, un león de la escena del zoológico mató a un guardia. El productor se salvó de una bomba que un grupo terrorista plantó en su hotel, y el encargado de efectos especiales sufrió un accidente automovilístico en el que su acompañante resultó decapitada.
Si los involucrados en esta película no tenían una maldición, seguramente eran las personas con más mala suerte del mundo.
El Exorcista
La situación en esta película fue tal, que en medio de las grabaciones contrataron a un sacerdote para que fuera a alejar a los espíritus, ya que un incendio y múltiples accidentes inexplicables habían estado ocurriendo desde el principio. Los que vivieron ese infierno aseguraban que aquello solo podía ser causado por un pacto con el diablo. Y es que, en esta ocasión también tuvo lugar la muerte, pues según distintas versiones entre 4 y 9 personas murieron durante el rodaje.
Pero tal vez lo más alarmante para muchas personas de producción fue que Linda Blair, la protagonista de la película, pronosticó la muerte de uno de ellos mientras “actuaba” una de las escenas en donde estaba poseída.
Vidas Rebeldes
Esta película tenía cuatro estrellas principales: Clark Gable, Marilyn Monroe, Montgomery Clift y Elli Wallach. Y su maldición no tardó en aparecer, pues Clark murió apenas 12 días después de que la película se hubiera estrenado, un año después le siguió Marilyn en una misteriosa muerte y años más tarde murió Clift, por abusos de drogas y alcohol.