Conoce la historia de una Sawney Beane y su familia caníbal que atormentó a tantas personas en el siglo XVI
Ya hemos relatado muchas historias de canibalismo en esta página, y aunque pudiera parecer que no puede haber nada peor a lo ya mostrado, no se podría estar más alejado de la realidad, pues existe la historia de 48 perversos individuos que vivieron por más de dos décadas escondidos en una cueva, con una dieta rica en humanos. Lo más perverso de la historia: eran todos una familia.
Sawney Beane y su familia caníbal
La historia de la familia caníbal “Los Beane” comienza con una extraña y perversa historia de amor. En algún momento a finales del siglo XVI, en Escocia, Sawney Beane, un joven granjero decide dar un cambio a su vida, y acompañado de su pareja, o esposa, no se sabe con certeza, se alejan a un viaje al otro extremo del país sin destino fijo, solo intentan alejarse lo más que pueden de todo rastro de civilización.
A mitad del viaje, en medio de un bosque la pareja de enamorados encuentra una caverna muy profunda y deciden instalarse allí. La cueva era enorme, extendiéndose más de un kilómetro, y esto los alienta cada vez más de no regresar al mundo civilizado jamás, sin embargo, por algún motivo Sawney Beane se niega a llevar a cabo su trabajo de granjero y no busca proveer, busca robar. De esta forma comienzan a asaltar a los viajeros que cruzaban por el poco transitado bosque y para no dejar pruebas de su existencia, los asesinan.
Al parecer esta forma de vida fue buena para ellos, pues pronto comenzaron a tener familia, quienes fueron educados casi como salvajes, pues no se les enseñaba nada del mundo exterior, al crecer se les fue enseñando la manera de atracar y asesinar a los viajeros. Y tan encerrados fueron en su diminuta comunidad que cuando crecieron lo suficiente, comenzaron a practicar el incesto, no solo entre hermanos, sino entre todos, padres e hijos por igual.
Sin embargo, esto tuvo sus consecuencias, pues cuando comenzaron a tener hijos, naturalmente necesitaron más comida, y la única solución que vieron al problema, fue el canibalismo. Por lo que siguieron atracando y asesinando como venían haciendo durante años, pero ahora no escondían ni se deshacían de los cuerpos, sino que los llevaban a la cueva con la intención de cercenarlos y devorarlos. De esta forma, poco a poco se convirtieron adictos a la carne humana y su cacería se tornó cada vez más violenta.
Esto obviamente repercutió en las poblaciones cercanas, pues tal vez por el hambre, la familia caníbal se volvió descuidada y se comenzaron a encontrar restos de personas, al principio se pensaba que eran ataques de lobos, pero cuando grupos de 5 o 6 personas también desaparecían, se volvió muy improbable el ataque de lobos. Los siguientes sospechosos fueron los posaderos circundantes, pues alguien comenzó a divulgar un rumor acerca de que ellos envenenaban a los grupos que se hospedaban en sus posadas para posteriormente deshacerse de sus cadáveres. Se registro que varios de ellos fueron torturados hasta la muerte por este motivo.
La familia, mientras tanto, seguía asesinando y seguía creciendo, y por 25 años se mantuvo en secreto, escondida en su cueva. Pero la suerte no los acompañaría siempre, pues al seguir creciendo tuvieron más descendencia y por los incidentes con los posaderos, la zona muy pronto tuvo muy mala reputación, haciendo que los viajeros que pasaban por el bosque fueron muy pocos, y tal vez por este motivo, la familia comenzó a exponerse de más.
En cierta ocasión, un grupo de 30 personas volvía de una caminata por el bosque cuando comenzaron a escuchar gritos desgarradores. Fueron a echar un vistazo, y lo que se encontraron fue horrible. Un hombre amenazaba con pistola a un grupo de más de 20 salvajes, se encontraba totalmente desencajado y asustado, mientras los restos de su pareja, una joven mujer, yacía en el suelo con las tripas siendo devoradas crudas por algunas mujeres salvajes. Pero estos se asustaron cuando el otro grupo llegó y dejaron al hombre en paz, huyendo hacia su cueva.
El hombre dio fe de los horribles hechos al rey de esa época y se mandó a un grupo de soldados a buscar a los caníbales. Al principio parecía una tarea imposible, pero apenas llevaron perros de caza a al bosque, reconocieron un olor: resultó ser el olor de la putrefacción. Cuando encontraron la cueva, resultó que tenían toda una pequeña colonia dentro de ella, llena de restos humanos, brazos y piernas desmembrados, seguramente guardados para comerlos después. La familia caníbal se había extendido de dos personas, a 48, 8 hijos, 6 hijas, 18 nietos y 14 nietas, todos caníbales.
El rey decretó que salvajes de ese tipo no tenían derecho a un juicio, y los hombres fueron desmembrados en público y las mujeres ardieron en la hoguera.
¿Y tú conocías la historia de Sawney Beane?