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La otra especie humana de Alaska

Se sabe por todos los restos milenarios que se han encontrado alrededor del mundo, que durante la historia del planeta han sido varias las razas de humanos que han caminado por ella. Al final de la carrera por la supervivencia, muchas de ellas se fueron quedando atrás, dejándonos a nosotros como los grandes vencedores. Escalando la pirámide alimenticia, domando la tierra y construyendo comunidades, poco a poco fuimos conquistando el mundo. Sin embargo, dentro del folclore de muchas culturas, desde siempre se han incluido muchas historias de otros tipos de seres, que ahora tomamos como simple leyenda pero que, en tiempos antiguos fueron mucho más que eso.

Este es el caso de los llamados Tornit, una especie que, según el folclore esquimal de Alaska, fue una especie de humanos con una gran estatura, que en las leyendas se acabaron traduciendo a gigantes. Según el folclore de aquellas frías tierras, cuando los esquimales llegaron por primera vez, se toparon a estas criaturas que acabaron llamando Tornit que, siendo los habitantes originales de aquellos lugares, les brindaron su ayuda y dejaron que se establecieran, les compartieron su comida y les mostraron la manera de sobrevivir a esas temperaturas. Solo que después de un tiempo, los esquimales comenzaron a superar a los gigantes, aprendiendo a usar kayaks para pescar y arpones para las focas. Por tal motivo los Tornit comenzaron a pelear con ellos, atacándolos con enormes lanzas o allanando sus tiendas cuando salían de cacería, matando a sus mujeres y niños.

En cierto ataque, un par de Tornit de pequeña edad, acabaron en una aldea humana, en la que fueron recibidos y adoptados por todos. Aprendiendo a comunicarse con ellos y siendo reconocidos por su habilidad para la cacería, se adaptaron rápidamente, pero en cierto momento, se le pidió una última prueba de lealtad al gigante macho, pidiéndole que matara a un perro, pero se negó y huyó. Mientras que, a la otra, una hembra, acabó casándose con un esquimal.

Se cuenta que los Tornit se dividían en distintas comunidades, y fue en una lucha entre ellos, que acabaron esparciéndose y escondiéndose en los bosques y cuevas. Viviendo de cazar a los cazadores humanos que indefensos ante su estatura y fuerza acababan sin poder si quiera defenderse.

¿Pero qué tiene de actual toda esta historia proveniente de una antigua leyenda? Pues que no sería más que una leyenda, de no ser por los grandes parecidos que tienen los Tornit, con los avistamientos de Pie Grande, este ser enorme que comparte grandes coincidencias con los supuestos gigantes: una estatura prominente, de naturaleza esquiva y habitantes de américa del norte. Tal vez cuando se hable de Pie Grande, no se esté hablando de una especie fantástica salido de un cuento de hadas. Tal vez se hable de una especie de humanos con una menor evolución, que la raza humana fue dejando atrás y ahora el mundo en que viven es algo que desconocen.

Si tomamos como referencia las múltiples razas que existieron antes, no sería imposible que algunos sobrevivientes de todos ellos se hubieran colado a nuestros tiempos y siguieran presentes, y fueran confundidos por criaturas extrañas.