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Los inquietantes secretos de Nosferatu

En 1922 se rodó la que se considera la madre de todo el cine de terror, una adaptación del clásico de la literatura, Drácula. Por cuestión de derechos de autor no se pudo usar la historia original, por lo que en lugar de Drácula, el conde se llamaba Orlok, y fuera de algunas pocas diferencias en su trama, era todo lo que separaba a una obra de la otra.

Desde el principio fue polémica, principalmente por el motivo de los derechos de autor, pero también por otros motivos mucho más macabros. Se trata de la legendaria película de Nosferatu.

Dicho nombre proviene de la palabra griega “Nosophoros”, que significa portador de plagas, pues en la literatura y las leyendas antiguas del vampirismo, esta se trataba de una plaga.

No es motivo de sorpresa que una obra tan revolucionaria en su época y en la que los procesos cinematográficos eran un tanto informales, se puedan derivar tantas leyendas, sin embargo, las de Nosferatu son más espeluznantes de lo que uno podría pensar, pues cuando se habla de esta obra no suele nombrarse estos inquietantes rumores.

Para empezar, tenemos la historia del actor: Max Schreck, apellido que significa nada más y nada menos que “miedo”. Su físico resalta ante la cámara por su languidez tan característica, pero además de eso, está la peculiar historia de su vida, pues ¿qué es lo que tiene de especial? que no se sabe nada de él. Y no es porque hubiera sido alguien desconocido antes de la película, porque de hecho era un actor de teatro reconocido en su época que llegó a presentarse en los mejores teatros alemanes.

La respuesta a su falta de datos y apariencia, para muchos, se debe a que en realidad se trataba de un vampiro. Y aunque este sea un rumor muy poco justificado, no ha sido razón para que dicha leyenda deje de existir.

Otro inquietante dato, es el relacionado con la actriz Greta Schröder, pues se cuenta que se trataba de una mujer toxicómana, o sea una persona con graves problemas de drogadicción, y que había sido contratada para que fuera mordida de verdad por Max, dado que en su estado de drogadicción no sería totalmente consciente.

No se sabe si por este motivo y otro, pero Greta murió durante la filmación. Sin embargo, no fue la única perdida del equipo, pues durante el tiempo de rodaje fueron varias las personas que desaparecieron, de quienes nunca se supo paradero y se presumieron muertas.

Un dato que fue comprobado por uno de los miembros fue que uno de los principales motivos que tuvo la productora para aceptar hacer un filme (para su tiempo) tan oscuro, no era solamente algo comercial, sino que la productora misma encubría una secta ocultista conocida como “Fraternas Saturni”. O sea que por tener una ambientación oscura y tenebrosa no hubo limitaciones, y en caso de que el rumor de la mordida real de Max hubiera sucedido realmente, no resulta tan imposible de creer con una productora ocultista.

Otro de los hechos que han dado lugar a muchas especulaciones acerca de las leyendas del filme, es el curioso anuncio que publicaron en el periódico, buscando “entre 30 y 50 ratas vivas y bien alimentadas”.

Sin embargo, después de todos los esfuerzos que le tomó a la productora hacer la película, luego de tantos problemas, ni siquiera se pudo comercializar, ya que la viuda de Bram Stoker, el escritor de Drácula denunció que la película era un plagio, por lo que al ganar, se ordenó que todas las copias fueran destruidas. Lo cual se hizo.

Para suerte de todos nosotros, para la fecha en que se dictaminó la orden, algunas copias ya habían sido distribuidas, y esas son las que llegaron hasta nuestros días y gracias a las cuales aún podemos disfrutar del filme.

Tal vez esta poca presencia ayudó a crear ese misterio alrededor de Nosferatu. Y sean verdad o no estos rumores, solo aquellos que estuvieron presentes en el rodaje lo sabrán, pero aun así, resulta inquietante pensar que pudieron ser reales.