La noche del 26 de abril de 1986, una alarma de la Central de Energía Nuclear obligó a los habitantes de Pripyat, una moderna ciudad a pocos kilómetros, a que fuera desalojada en cuestión de horas ¿el motivo? Una explosión en la central provocaría un daño irreparable en la zona en cuestión de horas y sería un cambio que se mantendría por miles de años. A partir de entonces los expertos aseguraban que no podría haber humano en el lugar sin poner su vida en extremo riesgo. Sin embargo, en el 2011, personas de todo el mundo comenzaron a pedir viajes turísticos, y el gobierno las aceptó.
Desde entonces existen paseos turísticos a la abandonada ciudad de Pripyat, que en su momento era una joven ciudad moderna con su sistema de metro, su hospital, un puerto y un parque de diversiones, pero tras el accidente fue abandonada tan rápido que sus habitantes dejaron la mayoría de sus pertenencias allí. Hoy en día está habitada por la naturaleza que comenzó a cubrirlo todo desde que se abandonó, y es justo por esos senderos que los viajes te llevan. Lo único que está prohibido son los edificios, ya que son estructuras sin mantenimiento.
En esta primera parte del viaje, se le otorga al visitante más de 10 horas para descubrir todo lo que quiera a la ciudad. Y como se trata de un viaje dividido en dos días, se te aloja en la ciudad de Slavutych, ubicada a 50 kilómetros y fundada por las personas que fueron evacuadas de Pripyat, por lo que no solo se podrá visitar la cuidad, sino conocer a las personas que vivieron la pesadilla.
El segundo día comienza lo bueno, ya que se te lleva a la mismísima Central Nuclear, vestido con un traje anti radiación e incluso un contador geiger para estar al tanto en todo momento de la radiación. Lo más interesante es que se te lleva por todos los lugares emblemáticos de la historia, como el botón AZ5, aquel que hubiera evitado todo si se activara a tiempo. Lo más interesante es que existen zonas que han seguido funcionando y adonde siguen yendo trabajadores.
Algo nuevo es que también se incluye la visita al Nuevo Confinamiento Seguro, un nuevo sarcófago que pretende proteger al mundo exterior de los estragos provocados por la Central por 100 años. Así como al cementerio, la plaza central, la piscina, el almacén de máscaras de gas, la escuela de música, la estación de trenes y el hotel. Todos en ruinas y a la espera de que el tiempo los derrumbe.
Ahora, la parte más impresionante de todo esto es obviamente la constante amenaza de la radiación, pero según los expertos, se asegura que la radiación que entraría al cuerpo en las horas que se estaría visitando. Claro que los menores de edad y las embarazadas tienen prohibido por completo. Pues a pesar de que según algunas asociaciones dicen es realmente malo, los expertos de la zona afirman que sería la misma radiación que al sacarte una radiografía. Existe una página oficial en donde se te informa todo aparte de los costos, por si quieres vivir una experiencia apocalíptica. Así que, sabiendo todo esto ¿Te atreverías?